Son muchos los amigos que me piden consejo a la hora de pedir una hipoteca, y su principal duda gira siempre en torno al mismo tema ¿Interés fijo o variable?
Recordemos que cuando pedimos una hipoteca, el banco nos suele ofrecer dos opciones:
- Interés fijo: Pagaremos el mismo interés y por tanto la misma cuota durante toda la vida del préstamo, aunque el tipo de interés que nos ofrece el banco es ligeramente superior al variable.
- Interés variable: El interés que pagamos cambiará en función del euribor y por tanto nuestra cuota puede cambiar, pero el interés que nos ofrecen es menor a día de hoy.
A la población en general les suele asustar el interés variable, porque aunque la cuota a pagar es inferior en el momento de la contratación, no tienen ganas de llevarse sorpresas desagradables y ver que la cuota de su hipoteca está subiendo sin parar como pasó en el año 2008.
Sin embargo yo suelo apostar por el tipo variable por dos motivos:
- Como los bancos saben que a la población les da miedo el interés variable, inflan los precios del interés a tipo fijo.
- Aunque suba el euribor en el futuro y por lo tanto suba nuestro interés variable, nuestra cuota será más grande en el futuro cuando los efectos de la inflación jugarán a nuestro favor, haciendo que esa cuota futura descontada a día de hoy sea más pequeña. Es decir, pagaremos más en el futuro cuando el valor del dinero es mucho menor que en la actualidad.
Aunque esta es mi visión general, siempre hay que aplicarla a cada momento concreto. Con las perspectivas actuales de inflación es muy probable que el Banco Central Europeo aumente los tipos de interés en el futuro, puesto que como analicé en una entrada anterior, subir los tipos es una de las principales herramientas para atajar la inflación (que ahora mismo sube como la espuma). Y cuando los tipos suban y el dinero en general sea más caro, el euribor terminará subiendo y afectando negativamente a todas las personas que tengan la hipoteca a tipo variable. Actualmente (enero de 2022) se pueden encontrar hipotecas a tipo fijo cercanas al 1% con vinculaciones asumibles (nómina + seguro de hogar y vida). Incluso algunos bancos como coinc ofrecen un 1.30 fijo a 20 años sin ningún tipo de vinculación. Por tanto, y rompiendo mi tradicional romance con el interés variable, si estás pensando en contratar una hipoteca actualmente mi recomendación es el tipo fijo.